La provincia de Jujuy, en Argentina, es la Capital Nacional de la Pachamama; y está conformada por cuatro regiones distintas donde los paisajes cambian por sus zonas y las maravillas de colores se dejan ver por toda la provincia.
1. Purmamarca
Purmamarca es un pueblo hermoso por donde se lo mire. Es ahí donde se toma la tan famosa imagen del Cerro de los 7 Colores, y es el primer pueblo turístico de la Quebrada de Humahuaca viniendo desde el sur. También es el foco de mayor flujo turístico de toda la provincia de Jujuy. Se puede recorrer el pueblo entero en pocas horas a pie, siendo su punto neurálgico la plaza central llena de artesanías locales, tortillas norteñas, y casas de adobe.
Lo que no te podés perder en Purmamarca, además del cerro icónico, es el Camino de los Colorados; una pequeña vuelta que se da por detrás del famoso cerro, y que no se puede creer por la cantidad de colores y paisajes que nos lleva.
2. Salinas Grandes
Las Salinas Grandes son un escenario increíble, kilómetros y kilómetros de sal tiñen de blanco un suelo que supo ser marrón rojizo; y a diferencia de lo que el imaginario propone, los restos de sal que quedaron en el piso -y todavía se cristalizan- no son fruto de la evaporación marina, sino de las aguas subterráneas de un volcán que entró en erupción hace miles de años.
3. Las Serranías del Hornocal (El Cerro de los 14 colores)
El Hornocal es una montaña que impresiona, parece salida de la imaginación creativa de un pintor surrealista; y aunque la parte científica explique que “es formación calcárea con distintos tipos de minerales que fueron erosionados y dejaron al descubierto un arcoíris de colores en las laderas de las montañas”, uno no deja de cuestionarse cómo puede haberse creado algo tan espectacular. Encima está a una altura de 4350 m.s.n.m. ¡Y sí que se siente!
Uno de los miradores más famosos para ver esta maravilla está a 24 kilómetros por la Ruta Provincial 73, desde la ciudad de Humahuaca. Se puede ir en bici, moto o auto. También se puede ir en camionetas que salen desde el puente de Humahuaca, tardan 45 minutos aproximadamente en llegar.
4. Tilcara
Tilcara está a una altura de 2.465 m.s.n.m., a un lado de la Ruta Nacional 9 y el Río Grande. El acceso es muy fácil y es el pueblo de la Quebrada de Humahuaca que mejor infraestructura tiene para la actividad turística: casi todas las casas son hospedajes, hay muchos lugares donde comer, artesanías en la plaza principal, bares y comercios en los alrrededores, y más vida nocturna que en otro pueblo de la quebrada.
¿Que no te podés perder?
El Pucará y Jardín Botánico de Altura. El Pucará de Tilcara es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Argentina; fue defensa y asentamiento de los habitantes precolombinos de la quebrada, y está instalado en una zona estratégica para el cruce de antiguos caminos (desde donde se podía vigilar y controlar los accesos a diferentes regiones del noroeste). El área arqueológica está dividida en diferentes sectores como las viviendas, los corrales, la iglesia, el centro ceremonial y el cementerio.
Otro lugar que tenés que conocer es la Garganta del Diablo, y la Cascada que queda a 20 minutos a pie de la misma. La ruta para llegar es sinuosa y empinada, pero vale la pena recorrer esos caminos, y la panorámica que se tiene de todo el pueblo desde las alturas.
5. Humahuaca
Humahuaca enlaza historias y tradiciones de sus raíces ancestrales, conserva creencias religiosas, ritos, fiestas, arte, música y técnicas agrícolas que son un patrimonio viviente único en el planeta. Sus calles angostas y empedradas, sus casas bajas de adobe, sus iglesias y sus pequeñas plazas, además de su mercado de artesanías, son algunos de los atractivos que hacen de Humahuaca un sitio ideal para caminarlo y sentir que el tiempo se ha detenido.
El pueblo de Humahuaca se encuentra cerca de los 2.929 m.s.n.m., rodeado de cordones montañosos hermosos. Es la entrada a la puna jujeña y es la última localidad turística de la Quebrada de Humahuaca en el camino hacia el norte (La Quiaca, frontera con Bolivia). El pueblo al igual que la quebrada toma el nombre de los antiguos pobladores de la zona: los omaguacas.
6. El Parque Provincial Potrero de Yala
El Parque Provincial Potrero de Yala, es una de las áreas núcleo de la Reserva de Biósfera de las Yungas.
Se trata de la primera reserva natural de la provincia de Jujuy, y por la presencia de más de 250 especies de aves (entre ellas, tucanes), fue declarada Área Importante para la Conservación de Aves. Las Lagunas de Yala son un sistema de seis espejos de agua rodeados de cerros verdes. Los mismos cumplen una función clave para el ecosistema de la región donde habitan diferentes aves acuáticas como las garzas, gallaretas y biguás. El camino para llegar es hermoso, y el complejo tiene todo para que no te quieras ir.
Dentro del Parque se destacan también el Criadero de Truchas (lleno de Calas) y la Cascada de la Horqueta.
Villa Jardín de Reyes -o simplemente Reyes- (donde están las Termas) es un paraíso terrenal invadido por todo el esplendor de la naturaleza (igual que Yala, que está a 5 km). Distintas tonalidades de verde se elevan y bajan al ritmo que le imponen los cerros pintando un hermoso paisaje. Esta villa turística es una zona de fuerte tradición y cultura gaucha, y a su vez la antesala del centro de las aguas termales más importantes de Jujuy.
Tanto el Parque como las Termas se encuentran sobre la Ruta Provincial 4 que conecta Yala y Reyes en una especie de “0” con la Ruta Nacional 9; a unos 10 kilómetros más al norte desde San Salvador de Jujuy.
7. Parque Nacional Calilegua
El Parque Nacional Calilegua exhibe una notable biodiversidad, característica de los ambientes selváticos. En el se han registrado 123 especies de árboles, 77 de helechos, 120 mamíferos y 350 de aves. Todo esto considerando solamente algunas de las formas de vida más sobresalientes. A ellos debemos sumar innumerables enredaderas, orquídeas, arbustos y bromelias y las numerosas formas de insectos y otros invertebrados que pueblan estas selvas y bosques.
Muchas de las especies se hallan en riesgo de extinción, como el Yaguareté y el Águila poma. Otras constituyen significativas rarezas como la Rana Marsupial y el Surucuá aurora (un ave emparentada con el quetzal centroamericano). También habitan Ardillas Rojas, Monos Capuchinos, Corzuelas, Zorros de monte y el Coendú, el puerco espín local.
La entrada al Parque, así como el uso del camping agreste Aguas Negras son gratuitos. El Parque Nacional se encuentra abierto todo el año. Se recomienda ingresar a los senderos entre 08:00 y las 15:00 horas.
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Fuente: Leerdelviaje.com
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